Entrevista a Diego Cabana, dueño del bar Pura Vida
El bar Pura Vida, ubicado en diagonal 78 entre 8 y 61, fue clausurado el viernes 20 de abril tras un reclamo de vecinos del barrio por desmanes nocturnos en la plazoleta La Noche de los Lápices –ubicada frente al local– y por ruidos molestos. El sábado 28, luego del pago de una multa, reabrió sus puertas pero sin la habilitación municipal para realizar shows en vivo.
El bar Pura Vida, ubicado en diagonal 78 entre 8 y 61, fue clausurado el viernes 20 de abril tras un reclamo de vecinos del barrio por desmanes nocturnos en la plazoleta La Noche de los Lápices –ubicada frente al local– y por ruidos molestos. El sábado 28, luego del pago de una multa, reabrió sus puertas pero sin la habilitación municipal para realizar shows en vivo.
Diego Cabana, propietario del bar, dialogó con Comunidad al palo! y contó que le sorprendió la queja de los vecinos por los incidentes en la plazoleta: “Es un tema que va más allá del lugar y tienen que solucionarlo los funcionarios de la Municipalidad. En la plazoleta hay gente viviendo porque no tiene un lugar donde parar”.
Con respecto a la denuncia por ruidos molestos, Cabana se refirió a una asamblea realizada el sábado 12 de mayo frente a Pura Vida y desmintió la versión que indicaba que había sido organizada por los autoconvocados de 8 y 61. “Ellos dijeron que no responden a esa asamblea; ya no sabemos cuáles son los intereses y qué está sucediendo realmente”, dijo, y agregó que si bien los vecinos siguen manifestándose contra los ruidos, esa asamblea “fue armada por alguien, no se sabe quién”.
Para finalizar, Cabana remarcó la importancia de tener un buen diálogo con las autoridades y los vecinos "para no llevar esto a un ida y vuelta sin retorno" y llamó a "luchar cada uno desde su lugar por una cultura independiente y libre".
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